Antecedentes del programa

Durante la temporada de lluvias, los nuevos propietarios de energía y los fabricantes de equipos de carga se preocupan por si la calidad de las estaciones de carga exteriores se verá afectada por el viento y la lluvia, lo que podría generar riesgos de seguridad. Para disipar las preocupaciones de los usuarios y que se sientan cómodos adquiriendo estaciones de carga, cada empresa fabricante de estaciones de carga debe fabricar sus productos de acuerdo con normas como la Nb/T 33002-2018, "Condiciones técnicas para estaciones de carga de CA de vehículos eléctricos". En esta norma, la prueba de nivel de protección es una prueba de tipo esencial (la prueba de tipo se refiere a la prueba estructural que debe realizarse en la etapa de diseño).

Desafíos del proyecto

El grado de protección de las pilas de carga de nueva energía suele ser IP54 o p65, por lo que es necesario realizar una prueba de lluvia completa sobre ellas, y todas las superficies requieren detección de rociado de agua. Sin embargo, debido al tamaño de la pila (principalmente debido a la altura), si se adopta el método convencional de lluvia de péndulo (incluso con el tubo oscilante de mayor tamaño), no se puede verter todo el agua. Además, el área inferior del dispositivo de prueba de lluvia de tubo oscilante es grande, y el espacio necesario para operar debe ser de 4 × 4 × 4 metros. La apariencia es solo una de las razones. El mayor problema es el gran peso de la pila de carga. Una pila de carga común puede alcanzar los 100 kg, mientras que una más grande puede alcanzar los 350 kg. La capacidad de carga de una plataforma giratoria común no cumple con los requisitos. Por lo tanto, es necesario personalizar una plataforma de gran superficie, resistente a la carga y a la deformación, y lograr una rotación uniforme durante la prueba. Estos son problemas importantes para algunos fabricantes sin experiencia.